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El uso de azulejos en el diseño de baños

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Los azulejos son un elemento que se lleva empleando desde hace mucho tiempo. Realmente la aparición de los primeros se remonta a Egipto y Mesopotamia. No obstante, tal y como los conocemos hoy en día debe su aparición a la cultura árabe. A ella se debe la introducción de los azulejos en Europa. En España en ciudades de Andalucía, como en la Alhambra de Granada, Málaga o Sevilla. 

El uso de azulejos en los baños es muy apropiado debido a sus características. Destacando principalmente su función como revestimiento de paredes y protección contra la humedad. A ello se debe su uso extendido en espacios como los baños, donde hay humedad se encuentra diariamente. 

Desde las antiguas civilizaciones hasta la actualidad, los azulejos se han utilizado con el objetivo de cubrir necesidades pero también de embellecer y personalizar los baños al gusto de cada uno. 

Con el paso de los años, la mejora de los azulejos ha ido en aumento. No solo por su funcionalidad, sino que cada vez es más amplia la gama en cuanto a formato, tamaño, color y acabado. Existen multitud de azulejos que se adaptan perfectamente al diseño particular de cada baño. 

Además, es un material que se emplea tanto en paredes como suelos en los baños, pero que a la vez se emplea también para crear mosaicos, murales u otros elementos decorativos. 

Gracias a las características que tienen los azulejos, permiten que el ambiente del baño sea limpio y mantenga los patrones saludables. Son suelos o paredes que permiten una fácil limpieza y que evita la creación de moho y hongos. Por lo que es un material perfecto si lo que se busca es combinar funcionalidad con estética y que además, perdure en el tiempo siempre que se haga un buen mantenimiento. 

Tipos de azulejos para baños

Los azulejos, hoy en día son un elemento casi imprescindible en la decoración de baños. Como decíamos combina la protección de estancias con mucha humedad y además es estético. Existe una amplia variedad de tipos de azulejos lo que facilita la elección, la cual debe ir acorde con las necesidades y estética del lugar, ya sea una casa, una oficina o cualquier otro espacio. 

Entre los tipos más destacados de azulejos se encuentran los azulejos cerámicos, porcelánicos, de vidrio, de piedra natural y los mosaicos.

Azulejos cerámicos 

Los azulejos cerámicos están fabricados con arcilla y otros materiales naturales. Para su fabricación se cuecen a altas temperaturas, unos 900 grados, gracias a la cual permite que se convierta en un tipo de azulejo resistente y robusto. 

Los azulejos cerámicos son una opción popular, que lleva usándose muchos años. Son azulejos muy diversos, ya que hay mucha variedad por colores, acabados o patrones. Y, por ello, son fáciles de combinar estéticamente. 

Este tipo de azulejos son fáciles de mantener y limpiar, por lo que es una opción práctica.  Dentro de ellos existe una variante especial, la de los azulejos esmaltados. Como su propio nombre indica son azulejos que tienen una capa de esmalte que da brillo, color, mejora la  resistencia al agua y también a las manchas. 

En Lopsa, con experiencia en el sector desde 1982. destacan la cerámica como “un producto polivalente, y excelentes en cuanto a su diseño que perduran en el tiempo, tanto por su estilo como por la riqueza de sus detalles”.

Azulejos porcelánicos

Los azulejos porcelánicos están fabricados también con arcilla, pero más fina que los cerámicos. Se caracterizan por las altas temperaturas que necesitan para su cocción. Esta debe ser de entre 1200 y 1400 grados centígrados. Son azulejos que destacan principalmente por su alta durabilidad y por su resistencia al desgaste. Importante si tenemos en cuenta que los baños son zonas muy transitadas. 

Como la mayoría de los azulejos están disponibles es una amplia variedad de diseños. Hay que imitan a la madera, la piedra, hasta otros que combinan la apariencia natural con un toque de modernidad. 

Son azulejos con una baja absorción de agua, lo cual hace que una de sus principales características sea la resistencia a las manchas y además, fáciles de limpiar. No requiere un elevado mantenimiento y además es una opción fácil de combinar a la vez que elegante. 

Azulejos de vidrio

Los azulejos fabricados de vidrio son modernos y dan luminosidad a los baños. En muchas ocasiones se hacen con vidrio reciclado y para que cumpla con sus características se funde en altas temperaturas. El vidrio es un material traslúcido y como tal, permite efectos exclusivos por la combinación de texturas y también de colores. 

Hay que tener en cuenta que estos azulejos necesitan un mantenimiento regular. Es susceptible de arañazos y manchas. Y para evitar que se estropee hay que mantenerlos limpios y cuidados. 

Son azulejos que dan aspecto de modernidad. Encaja a la perfección con los nuevos estilos, pero es una elección personal. 

Azulejos de piedra natural

Los azulejos de piedra natural son aquellos que se extraen directamente de canteras. Por ello, la variedad también es amplia. Es muy frecuente que sean de mármol y pizarra. Debido a que las piedras son muy variadas entre sí, el azulejo también lo es. La textura y color de cada uno de ellos es única. Aunque la tonalidad, por lo general, está ligada al ambiente cálido. 

Son un tipo de azulejo que normalmente necesita un sellado continuo para conseguir protección contra el agua. Está disponible en una variedad de patrones y por tanto es fácil de personalizar con el estilo del baño. 

Los azulejos de piedra natural son especialmente utilizados por los amantes de la naturaleza. Ofrecen un toque rústico a la vez que elegante. 

Azulejos de mosaico

Los azulejos de mosaico son aquellos que están formados por pequeñas piezas que se unen para formar patrones o teselas de diversos colores. 

Son un tipo de azulejo que aporta originalidad y creatividad en los baños. Es habitual que estén fabricados con variedad de materiales, aunque los más habituales son el vidrio y la cerámica. Normalmente llevan hojas preinstaladas para que su colocación sea más sencilla. 

Es un azulejo que permite variar en color, forma y textura. Con diseños exclusivos, adaptados al gusto personal de cada uno. También destaca su versatilidad. Su uso más frecuente es en zonas específicas que resaltan como las duchas o lavabos.

Consejos para elegir azulejos para el baño

A la hora de crear un baño desde cero o renovarlo, uno de los aspectos más importantes es la elección de los azulejos. De ello depende, en parte, la creación de un espacio bonito estéticamente a la vez que funcional. 

  • Estilo 

Cuando queremos montar un baño, la primera pregunta que hay que hacer es ¿qué estilo queremos que tenga? ¿Moderno, clásico o más tradicional? En función de la respuesta a esta pregunta será posible decantarse por un tipo u otro de azulejo. Por ejemplo, por sus características, los azulejos cerámicos o porcelánicos, están pensados para quienes buscan un estilo moderno y versátil. Mientras que, por otro lado, los azulejos de piedra natural ofrecen un toque clásico y atemporal. Por su parte, los azulejos mosaicos se emplean para crear diseños únicos y personalizados.

  • Tamaño 

El tamaño es otro de los aspectos más importantes a tener en cuenta. Del tamaño depende en gran medida la elección del azulejo. Hay que tener en cuenta que los azulejos grandes son más recomendables para los baños más pequeños, ya que dan una visión más espaciosa. La apariencia es más uniforme y por tanto, más amplia. En cambio, los azulejos pequeños tienen mejor acogida en los baños grandes. Permite una mayor variedad de patrones y texturas y al ser un baño grande, el espacio no se ve afectado. En estos casos el azulejo rompe con la monotonía y añade dinamismo al lugar.

  • Iluminación

Sin iluminación los azulejos no tienen sentido, pues no permitiría su adecuada percepción. Para escoger la iluminación hay que valorar el color del azulejo, pero también su textura. La iluminación repercute directamente en la forma en la que se ve el azulejo. Cuando un azulejo es brillante tiene capacidad para reflejar la luz. Ofrecen más iluminación cuando la natural es escasa y por ello, se utilizan en baños pequeños para ganar sensación de amplitud. En cambio, los azulejos con colores mate se emplean para ofrecer sensación de tranquilidad. El motivo es que absorbe la luz en lugar de reflejarla. Por ello, la elección entre brillo y mate dependerá de la iluminación y estilo del baño. 

  • Mantenimiento

Cuando entra en juego la elección de los azulejos para el baño es imprescindible valorar su mantenimiento para aumentar su durabilidad. Por ejemplo, los azulejos cerámicos y porcelánicos, son conocidos por su resistencia y facilidad de limpieza. Por este motivo, son adecuados para baños que no tienen mucho tráfico y que por tanto, no exige una limpieza profunda diaria. En cambio, los azulejos de piedra natural requieren un sellado periódico para proteger contra la absorción de agua y manchas. Por lo que son más apropiados para baños que puedan tener una limpieza frecuente. 

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