El acero, el material que marca tendencia en joyería.

Las joyas de acero marcan tendencia.

Parece que la joyería son metales lujosos (oro, plata, platino) combinados con piedras preciosas. La realidad es que no es oro todo lo que reluce. Un metal menos noble, el acero, ha irrumpido con fuerza en el mundo de la joyería y lo ha hecho para quedarse.

Los joyeros de Babu, unos mayoristas que llevan más de 20 años abasteciendo joyerías de toda España con su amplio catálogo de joyas de oro, plata y acero, señalan que en lo que se refiere al acero inoxidable, el diseño y la durabilidad han suplido con creces la nobleza que presentan otros materials, ganándose el corazón del público.

Y es que el acero encaja a la perfección con los gustos estéticos que imperan en la actualidad. Lo podemos ver en las pulseras que combinan acero con piel. Unas pulseras que a finales del siglo XX solo se podían ver en los mercadillos hippies y en ferias de artesanos y, que hoy, inundan los escaparates de todas las joyerías.

Con acero se fabrican vistosos cordones de diseños intrincados que lucen espléndidos en los cuellos de las damas. Cadenas y collares que entremezclan el acero con elementos de plata y oro blanco, sin saber muy bien donde termina uno y empieza el otro. Pendientes de formas caprichosas que hipnotizan con su brillo metálico.

Pero sin duda, si hay una joya de acero que se está haciendo popular son los anillos. Para él y para ella, o para los dos. Porque el acero tiene ese aire ambiguo, unisex, universal, que permite que lo lleve cualquier persona, sin importar su género, ni su edad, ni su extracción social. Si se luce con estilo, el acero es un material que siempre queda bien.

El prêt-à-porter de la joyería.

Dice la revista Vanitatis que en pleno siglo XXI, la calle marca el ritmo a la moda y está empezando a hacerlo también en la joyería.

Este es un proceso relativamente nuevo. Durante buena parte del siglo XX, eran diseñadores como Coco Chanel, Christian Dior e Ives Saint Laurent los que ponían patas arriba las concepciones estéticas y después la gente adaptaba sus diseños. En cierto modo, nuestra forma de vestir ha cambiado gracias a ellos.

Hoy parece que el proceso es al revés. Es la forma en la que viste la gente, para sentirse cómoda, la que lleva la batuta. Un ejemplo de ello es como algo tan de andar por casa como los pantalones de chándal o los shorts deportivos están inspirando a las pasarelas.

En la joyería está sucediendo algo similar. Complementos como los pearcings, las pulseras de piel o las cadenas de eslabones gruesos están inspirando a los diseñadores joyeros. Emiliano Suárez, creador de la marca “Aristocrazy”, un ejemplo de este cambio, señala que este tipo de joyería no es solo moda, es un estilo de vida. La gente busca joyas que pueda lucir en cualquier momento, no solo en ocasiones especiales. Una tendencia que en términos de facturación hace temblar al osito de Tous.

En este proceso, el acero es uno de los materiales que han salido más beneficiados. El acero conecta con ese espíritu urbanita, callejero. Es un material versátil y duradero.

Algunas marcas como Viceroy han transformado el acero en su emblema. Fabricando joyas muy populares con un fuerte espíritu juvenil. Que, sobre todo, cumplen la función para la que han sido creadas. Que se puedan llevar en cualquier ocasión, tanto a diario, como en un evento más señalado, sin desmerecer el outfit escogido.

Los anillos de acero triunfan en internet.

El blog El Periodista Digital remarca que los anillos de acero inoxidable se han convertido en uno de los productos más vendidos dentro de la categoría de complementos para hombre en algunos marketplaces de internet como Amazon.

Según ellos se debe a que es un producto adecuado para todas las edades y para todos los bolsillos. Mientras un anillo de plata de cierta calidad no lo puedes encontrar por debajo de 100 €, un anillo de acero, con un bonito diseño, se adquiere por un precio de dos cifras.

No estamos hablando de bisutería barata. Las marcas más reputadas de moda y joyería  comercializan sus anillos de acero en la red, alcanzando un notable éxito.

Son por ejemplo los anillos de acero inoxidable del Emporio Armani. Unos anillos tipo alianza, planos, con una anchura de 0,39 pulgadas y donde destaca el logotipo de la marca. Seriado y fechado en el interior, permite su personalización mediante grabado en la parte interna del anillo.

Diesel lanza una sortija para hombre con un sello conformado en acero esmaltado negro con el dibujo de una cabeza de mohicano. El resto del anillo presenta unas líneas curvas sugerentes.

La marca Fossil, por otro lado, presenta en la red un conjunto de sortijas con una línea industrial, que parecen arandelas planas, con un acabado bicolor. Plateado por la parte superior y dorado en el interior.

Por último, la marca Cassiecam lanza una línea de anillos decorados con diseños de inspiración medieval, con motivos celtas y normandos, entre los que podemos encontrar anillos tipo sello y alianzas.

El acero encaja en la joyería moderna.

La joyería contemporánea es muy diferente al estilo que, en cuanto a joyas, ha predominado en otras décadas anteriores. Antiguamente, se buscaba que la joya tuviera una presencia en sí misma. Que acaparara las miradas y en cierto modo ensombreciera otros aspectos estéticos de la persona. Se lucían joyas grandes, elaboradas con materiales lujosos que no pasaran desapercibidas.

Digamos que en la joyería moderna, la joya es un complemento integrado en el conjunto, que lo resalta, pero sin acaparar toda la atención. Priman las joyas discretas que pretenden pasar sutilmente desapercibidas. Un elemento elegante, que hace que la persona luzca una presencia distinguida, pero sin saber muy bien por qué. Si te detienes y analizas parte por parte, te das cuenta de que el sujeto porta una joya con un cuidado diseño.

Esta quizás haya sido una de las razones por la que los tonos blancos y metalizados, presentes en la plata, el acero y el platino, se han hecho con la hegemonía de las joyas modernas, frente al amarillo del oro, tan apreciado en otras épocas.

Otra de las características de la joyería contemporánea, que hemos mencionado anteriormente, es la versatilidad. La gente le gusta comprar joyas que puedan lucir con frecuencia. Complementos que se los puedan poner en el día a día y, por supuesto, en ocasiones más señaladas. No se buscan joyas para tenerlas guardadas en un joyero.

El acero cumple ese cometido. Quizás una gargantilla con diamantes no te la pongas a menudo, pero unos pendientes de acero con forma de troncos trenzados puede ser que te apetezca lucirlos durante una temporada.

Las ventajas de usar acero en joyería.

El acero es interesante para el público, pero no lo es menos para los joyeros. Estas son algunas de las ventajas que reporta este material para los artesanos y diseñadores de joyas:

  1. Durabilidad y resistencia: El acero es un material duradero y resistente a la corrosión, lo que lo convierte en una opción adecuada para diseñar joyas pensadas para usarse con frecuencia y que sean duraderas. Los joyeros y diseñadores pueden confiar en que las piezas de acero mantendrán su apariencia y calidad a lo largo del tiempo, lo que reduce la necesidad de mantenimiento y reparaciones frecuentes.
  2. Perfecto para el diseño: El acero es un material maleable que puede ser moldeado y trabajado de diversas formas, lo que brinda a los diseñadores una amplia libertad creativa. Desde piezas delicadas hasta diseños más audaces y contemporáneos.
  3. Material económico: En comparación con metales preciosos como el oro y la plata, el acero es generalmente más asequible, lo que permite a los joyeros crear piezas de joyería de alta calidad a costes más accesibles para una gama más amplia de clientes.
  4. Diversos acabados y texturas: El acero puede ser tratado con una gran variedad de acabados, como pulido, brillante, mate, satinado o texturizado, lo que permite crear piezas con diferentes estilos y apariencias.
  5. Compatibilidad con otros materiales: El acero se puede combinar fácilmente con otros materiales, como piedras preciosas, cristales, cuero, madera, para crear diseños multifacéticos. Los joyeros pueden experimentar con diferentes combinaciones de materiales para agregar profundidad y complejidad a sus creaciones.
  6. Hipoalergénico: Otra característica interesante es que el acero inoxidable es un material hipoalergénico, lo que significa que es menos probable que cause reacciones alérgicas en la piel sensible. Esto es especialmente beneficioso para diseñadores que deseen crear piezas que puedan ser usadas por una amplia gama de personas sin preocuparse por posibles irritaciones.
  7. Fácil de mantenimiento: Las joyas de acero son fáciles de cuidar y mantener. Son resistentes a la corrosión y no se oxidan ni manchan con facilidad. Esto reduce la necesidad de limpieza y pulido frecuentes.

Tanto por el atractivo que suscita en el público como por los beneficios que presentan para los joyeros, el acero va a ser un material con un protagonismo propio en la joyería.

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