Cualquier actividad que realicemos en nuestra vida diaria puede entrañar un riesgo para nuestra salud, desde la actividad física, actividades de ocio y entretenimiento, juegos, participación en deportes, realización de las tareas del hogar, hasta las actividades profesionales derivadas de nuestro trabajo y modo de ganarnos la vida. La Ley de prevención de Riesgos Laborales tiene por objeto la determinación del cuerpo básico de garantías y responsabilidades preciso para establecer un adecuado nivel de protección de la salud de los trabajadores frente a los riesgos derivados de las condiciones de trabajo, y ello en el marco de una política coherente, coordinada y eficaz de prevención de los riesgos laborales.